¿Qué es una quemadura?
Una quemadura es una lesión en la piel provocada por calor, electricidad, sustancias químicas o exposición prolongada al sol. Los bebés y niños pequeños son especialmente vulnerables a las quemaduras. La mayoría de las quemaduras suelen curarse en un período de una a tres semanas.
Tipos de quemaduras
Existen tres tipos principales de quemaduras:
Quemaduras de primer grado: Afectan solo la capa externa de la piel, causando enrojecimiento y dolor al tacto. Son leves y generalmente sanan en pocos días.
Quemaduras de segundo grado: Son más profundas y severas, causando enrojecimiento, hinchazón y ampollas. La piel es muy dolorosa al tocarla y estas quemaduras tardan alrededor de dos semanas en sanar.
Quemaduras de tercer grado: Son las más profundas y graves, dejando la piel dura y con una apariencia de cuero. La piel puede verse roja, negra, marrón o blanca y puede no doler al tacto debido al daño nervioso.
Signos y síntomas
Los síntomas incluyen enrojecimiento, dolor, hinchazón y ampollas en la piel. También pueden presentarse dolor de cabeza, fiebre y mareos.
Cuidados
El tratamiento varía según el tipo de quemadura. Las quemaduras de primer grado y las leves de segundo grado pueden tratarse en casa, mientras que las quemaduras más severas de segundo grado y las de tercer grado requieren atención médica.
Para una quemadura leve:
Enfríe la piel con agua fría durante cinco a diez minutos.
Lave suavemente la quemadura con agua tibia y jabón.
Seque la piel sin frotar, utilizando una toalla suave y limpia.
Aplique un vendaje flojo sobre la quemadura.
Eleve la zona afectada por encima del nivel del corazón para reducir la hinchazón.
Beba de seis a ocho vasos de líquido al día.
Es posible que necesite medicamentos para el dolor y una inyección contra el tétano. También pueden recetarle antibióticos para prevenir infecciones. En casos graves, puede requerir hospitalización para recibir cuidados especiales.