Desde Centro América, hasta América del sur y el caribe a esta fruta que en su parte externa es de color verde y en su interior presenta una textura carnosa con un sabor agridulce se le conoce popularmente con varios nombres como por ejemplo: Mamoncillo, quenepa, chupalotes entre otros, su nombre científico resulta ser Melicoccus bijugatus, pero sin importar el nombre que se le dé a esta fruta según cada región, resalta por sus propiedades beneficiosas para el organismo de las personas.
Esta fruta se consume entre las personas de forma natural, en refrescos o enlatados, posee diferentes efectos positivos para el organismo ya que es antidiarreico, tiene efectos astringentes y también antimicrobianos, es utilizado en las personas para combatir el asma, afecciones respiratorias y gastrointestinales.
De este fruto se puede consumir todo, es decir, la corteza, su textura carnosa y de sabor agridulce y su semilla, por ejemplo, la corteza de este fruto puede servir para combatir la disentería al igual que la diarrea.
Este fruto tiene una muy buena composición nutricional pues contiene, vitamina C, vitamina B, vitamina A, carbohidratos, grasa, fosforo, hierro y calcio.
Por su contenido se puede precisar que es una fruta recomendada para combatir el stress; y ya que es rica en fibra natural ayuda controlar y regular los niveles de colesterol.
El mamoncillo era utilizado en la época precolombina para aliviar problemas de salud asociados a virus y bacterias, también se precisa que los ácidos contenidos en esta fruta pueden ser beneficiosos para las mujeres en gestación.
Estudios realizados en una prestigiosa universidad de los Estados Unidos arrojo como resultado que luego de comer mamoncillo por un prolongado tiempo disminuyeron enfermedades de tipo digestivo.
Como se ha afirmado, esta fruta contiene complejo B, vitaminas y otros minerales, lo cual es beneficioso para aliviar infecciones de tipo urinarias y bronquiales.
¿Cómo se puede consumir esta fruta?
El mamoncillo es una fruta que se puede consumir al natural como se consumen otros tipos de frutas, simplemente basta con romper la cascara y disfrutar de su contenido carnoso cuyo sabor es agridulce, cabe recalcar que se debe tener precaución con los menores de edad ya que la semilla puede producir atragantamiento.
Otras maneras de consumir el mamoncillo pueden ser: En dulces, mermeladas, jaleas, jugos y hasta bebidas alcohólicas.